La isla del Barza

El Camp Nou le queda chico a los catalanes y ya tienen varios proyectos en carpeta para solucionar los problemas de transporte, entretenimiento y capacidad del estadio actual.
Emili Vidal, arquitecto y socio del Barza, presentó una idea futurista para crear construir la joya arquitectónica del fútbol moderno.
Muy al estilo de los jeques de Dubai, esta isla artificial se conectaría con el mundo real a través de 200 metros de puentes. Los 150 mil espectadores podrán acceder por tierra, mar y aire. Como se lee, podrían llegar en barco o helicóptero. También está en estudio la posibilidad de un tranvía que circule alrededor del campo (¿llevaría a los jugadores que patean los tiros de esquina?).
El proyecto deberá superar dos problemas: el presupuesto y la obra de remodelación ya aprobada. En cuanto al primero, el estudio arquitectónico sostiene que el costo rondaría los mil millones de euros, pero la recalificación del estadio generaría por sí sola, unos 700 millones. Esta suma aún no toma en cuenta la explotación comercial de los entretenimientos y negocios de la isla artificial.
En cuanto a la rehabilitación ya acordada con el estudio de Norman Foster, el arquitecto Vidal sostiene que las refacciones no resuelven los problemas de accesibilidad ni ampliación de las zonas de ocio. Además, los abonados de la primera bandeja seguirían sin ver adecuadamente los goles de Messi. Aquí pueden ver un boceto del Camp Nou según Foster.
Más allá de la decisión final, la isla artificial del Barcelona impacta por lo bella y audaz, dos cualidades propias de la ciudad y su fútbol. ¿Cuál de las dos propuestas te gustan más?